Menos mal que se va diluyendo el ruido mediático que incluía la palabra Máster, y que tanto daño ha hecho y cuyo alcance final es difícil diagnosticar.

Me pongo en la piel de las personas que estén precisamente en estos momentos a punto de matricularse en uno, o a mitad de otro, y la verdad imagino estarán desmotivados y desilusionados. Y con razón. La injusticia es muy grande.

Mi experiencia con los Másters y Post-grados en general ha sido muy positiva y de aplicación totalmente práctica. En mi caso, en Gestión de Pymes, en I+D+i y por supuesto en Aguas.

Además, llevo desde 2006 colaborando con el Master de Aguas de AIMME, ya desde hace unos años impartido desde AIDIMME y la Universidad Católica de Valencia.

Yo lo cursé en 2004-2005, y la parte de las prácticas de ensayos en plantas piloto (pilotajes) me llegó tanto que dos años más tarde, en 2007, nacería Acondaqua basándose en eso, en los pilotajes IN-SITU con una Unidad Móvil como laboratorio.

Tanto cuando era Responsable de la línea de Aguas Residuales como asalariado en otra empresa, como cuando monté Acondaqua, siempre fue ese Master (y un Diploma de Especialización que impartían además hace años) mi cantera para el equipo, y así se incorporaron much@s alumn@s.

Faltan Especialistas en Agua

Bueno, pues a punto de empezar el curso me he enterado de que aún hay plazas, y que hay preocupación por la caída de inscripciones en el Máster. Y ciertamente es preocupante.

Y es que es muy raro que en mi día a día me encuentre que mis clientes tienen a una persona encargada de las Aguas, y que sabe lo que necesita y cómo operarlo, en líneas generales, pero lo suficiente para poder transmitir a Gerencia la importancia de un buen sistema de tratamiento de aguas correctamente dimensionado.

Lo habitual es que no sepan absolutamente nada de lo que les estás explicando como la solución al Requerimiento de la Confederación Hidrográfica o de la Entidad Municipal de Saneamiento que han recibido. Y al que tienen que contestar en breve con una solución, o si no….mal.

Y esto provoca que se tomen habitualmente malas decisiones, centradas en bajo coste y mucho ingenio/picaresca para salvar la situación con la administración.

Bajo su punto de vista la inversión en la depuradora es “no productiva” y difícilmente amortizable, y cuando escuchas algo por lo que tienes que pagar, de lo que no entiendes nada y que además te fastidia porque en el otro polígono de al lado hacen lo que quieren con los vertidos….pues es difícil acertar en la decisión, y confiar en tu interlocutor.

Por eso hacen falta Técnic@s Especialistas en Agua. Por eso hacen falta los Masters de Agua.

Alejandro